Programación neurolingüística más a fondoCambio de actitud vs. Una buena programación
¿Es la actitud en el ser humano un hecho independiente de cualquier otra circunstancia, que se pueda cambiar fácilmente sin afectar otros aspectos básicos de la psique humana? ¿Son los pensamientos improvisados o circunstanciales, que aparecen y desaparecen?, ¿Se pueden crear nuevos hábitos de un día para otro, y seguir siendo fieles a ellos consciente e inconscientemente? Definitivamente no.
Los pensamientos, conductas y hábitos son consecuencias de procesos anteriores en la mente humana, y tratar de modificarlos sin tener en cuenta sus orígenes es tan necio como andar por las ramas del árbol del mal sin afectar sus raíces. “Entre más cortes las ramas sin tocar las raíces, más se fortalecerán”.
El asesor empresarial Guillermo Villa Ríos, comenta que cuando se requieren cambios verdaderamente estructurales es indispensable conocer a fondo los elementos, las circunstancias que los anteceden. A continuación, relaciona ocho pasos que determinan lo que comúnmente se llama, Destino:
1. Lenguaje: aunque existan muchas formas de lenguaje y comunicación, las palabras son indudablemente el principio de la creación, todo lo que pasa es la vida de cualquier persona ha sido creado con palabras, indiferentemente de que se hayan pronunciado en serio o en broma, con rabia o alegría. La palabra hablada posee fuerzas insospechadas, es dinámica, creativa o destructiva. La palabra es un don divino y se debe usar con respeto sacro.
2. Mente subconsciente: ubicada en el hemisferio derecho del cerebro. La repetición de las palabras crea en la mente subconsciente ideas, creencias, programas mentales y paradigmas.
3. Mente consciente: Ubicada en el hemisferio izquierdo del cerebro. Aquí se producen los pensamientos que no son otra cosa que las imágenes y los sonidos de los paradigmas. Son producidos por estímulos internos o externos, lo que indica que los pensamientos no son improvisados, y que las palabras son su expresión.
4. Sentimientos: Son estados mentales, en un sentido práctico, hijos del pensamiento, se constituyen en motivadores o desmotivadores del ser humano.
5. Actitudes, conductas, comportamientos: son el fruto de los pensamientos animados por los sentimientos.
6. Hábitos: producidos por la repetición de las conductas. Pueden ser positivos o negativos, jamás son neutros ya que siempre producen efectos en el ser humano. Los hábitos positivos determinan las virtudes y los negativos los vicios. Constituyen los legítimos gobernadores de la vida humana.
7. Carácter: está constituido por el conjunto de todos los hábitos, determina desde luego la calidad humana, entre más hábitos positivos tenga una persona más fuerte es su carácter y posee mayor fuerza de voluntad, entre más hábitos negativos tenga más débil es su carácter.
8. Destino: considerado por muchos como la buena o la mala suerte. Lo que significa que cada ser humano es el arquitecto de su propio destino y que siempre representa la consecuencia de tus propios procesos.
Por lo anterior podemos afirmar: “dime cómo hablas y te diré quién eres”. Si el estudiante quiere asumir la responsabilidad de su destino, debe asumir ya, la responsabilidad de su boca. Padres e hijos deben construir mediante palabras asertivas, paradigmas efectivos que generen actitudes positivas hacia su carrera, el mundo que los rodea y principalmente hacia sí mismos.
